«Me ha interesado siempre la interpretación del retrato.
Porque en cada hombre hay un rostro físico y otro metafísico.
Me interesa de cada ser humano esto, sus dos espacios: los que vive y habita.
Le observo.
Lo aprendo.
Cuando ya le conozco, lo interpreto. Ya no necesito más su presencia física. Más bien, me estorba».

Pablo Serrano

Blog de WordPress.com.